Transformación Social en Hato Mayor: 275 Familias Aseguran su Futuro con Títulos de Propiedad

En un significativo evento liderado por Joel Santos Echavarría, ministro de la Presidencia, Hato Mayor se convirtió en el escenario donde 275 dominicanos vieron materializado el sueño de la propiedad legítima. El pasado miércoles, la Unidad Técnica Ejecutora de Titulación de Terrenos del Estado (UTECT) en conjunto con el Instituto Agrario Dominicano (IAD), formalizó la entrega de títulos definitivos a ciudadanos que, hasta ahora, ocupaban sin un documento legal, terrenos pertenecientes al Estado.

Cubriendo una extensión de 271,163.2 metros cuadrados en áreas residenciales de La China, Villa Navarro, La Jagua, La Palmilla y Villa Vilorio, este acto no solo representa la culminación de un proceso de legalización de tierras, sino también el inicio de una nueva etapa de seguridad y desarrollo para los ahora propietarios y sus familias.

Joel Santos Echavarría, al dirigirse a los presentes, remarcó la titulación como piedra angular de las políticas públicas del Gobierno de Luis Abinader, subrayando la importancia de la propiedad de la tierra para la prosperidad y equidad nacional. "La entrega de títulos es fundamental en la construcción de un país próspero y justo", afirmó Santos Echavarría, evidenciando el progreso alcanzado con la distribución de más de 88,727 títulos definitivos hasta la fecha, incluyendo más de 6,000 en el año en curso.

Duarte Méndez, al frente de la UTECT, destacó el esfuerzo continuo por regularizar la situación de 547 familias, con una inversión gubernamental de RD 43,760,000, enfatizando el compromiso del Estado con el bienestar de sus ciudadanos. Por otro lado, Guillermo García del IAD, resaltó el impacto transformador de la titulación en la vida de aproximadamente 1,100 personas, marcando un antes y un después en su lucha contra la pobreza.

La reacción de los beneficiarios fue de profunda gratitud hacia el Gobierno, reconociendo en la entrega de estos títulos un acto de justicia social que garantiza su derecho a un hogar digno y seguro, y abre las puertas hacia oportunidades de desarrollo personal y comunitario. Este evento no solo simboliza la realización de un compromiso gubernamental, sino también el fortalecimiento de la base para una sociedad más equitativa y próspera.